Pese a estar en un mes como noviembre, lejos de las altas temperaturas y de las estampas típicas del vóley playa en verano, la actividad de este frenético y espectacular deporte no para. Además del voleibol en pista, en los últimos años ha surgido la modalidad de vóley en nieve para que los aficionados puedan disfrutar de este deporte durante todo el año.

De momento el circuito mundial no cuenta con muchas pruebas, pero estas ya se extienden por los dos continentes. En zonas de montaña y resorts de esquí, los aficionados pueden ya disfrutar de sus deportes favoritos en la nieve pero también del mejor voleibol sobre esta superficie.

En 2019 el calendario se ha reducido a tres pruebas, las cuales se han disfrutado en Wagrain-Kleinarl (Austria) del 28 al 31 de marzo; en Plan de Corones/Kronplatz (Italia) del 4 al 7 de abril; y en Bariloche, Rio Negro (Argentina) del 1 al 4 de agosto en el invierno austral.

El vóley sobre nieve supone una variante más del voleibol en un entorno espectacular como es estar rodeado de nieve y de montañas. A diferencia de sus ‘hermanos’ sobre pista y sobre nieve, esta modalidad la juegan tres jugadores por equipo y se juega al mejor de tres sets como el vóley playa, pero cada set lo gana el conjunto que llegue a 15 puntos con una diferencia de dos puntos sobre sus rivales.

Evidentemente, llevan ropa preparada para la ocasión ya que los jugadores pueden llevar mallas térmicas e incluso usan botas de fútbol con tacos para garantizar el agarre en la nieve y no resbalarse al tener que realizar alguna acción del juego.