Vuelve el eterno dilema. Nos disponemos a pasar una relajante jornada en la playa o la piscina cuando, de repente, comienzan las dudas y los remordimientos, como ¿por qué no cuidé más mi piel los meses antes?, ¿por qué dejé la Operación Bikini a la mitad?, ¿por qué me apunté al gimnasio y después no fui? y la más común, ¿me maquillo o no para ir a la playa? No nos engañemos, somos fan de lo natural, pero queremos estar divinas en cualquier sitio, sin que ello impida que actúe nuestro protector solar.

Por suerte, tenemos buenas noticias. Sí nos ponemos maquillar, siempre y cuando empleemos los productos adecuados, de larga duración y waterproof, eso sí, después de nuestra crema protectora. El maquillaje es opcional, pero nunca lo es cuidar nuestra piel del sol.

Las bases de maquillaje son nuestra aliadas en las largas jornadas de playa. Uno de mis must have es el Face and Body de M.A.C, muy natural y resistente al agua, una propiedad indispensable para todos estos productos. El bote de 50 ml sale a 29 euros.

Un buen consejo es aplicarse una crema BB para ir a la playa. Nos ahorran mucho tiempo, una gran noticia cuando estamos de vacaciones. Estos productos permiten hidratar, disimular imperfecciones y proteger del sol en una sola pasada. Existen muchísimas marcas en el mercado, aunque yo os recomiendo la Aquasource BB Cream de Biotherm, que hidrata hasta en cinco capas y que unifica, corrige y protege (15 SPF) la piel con frescura. La podemos encontrar en el mercado por 19,90 euros.

Otra opción es el Fondo Luminoso Fluid Sheer de Giorgio Armani, que se puede aplicar solo o posterior a la base de maquillaje y  que ilumina y realza las partes del rostro que quieras.  Es ideal para el verano, ya que no resulta nada grasiento. Lo tenemos por 55 euros.

Mucho se ha hablado de la imposibilidad de usar polvos compactos para tomar el sol. Pues bien, eso no es cierto, aunque sí que debemos contenernos y no excedernos con el uso. Uno de esos must-have es el Sun Secret Sun Sun Protective and Antiaging Compact Make Up de Sensilis, una opción perfecta para pieles muy delicadas y que necesitan una alta protección con su 50 SPF. Disponible en tres tonos (Natural, Dorado y Bronceado), también sirve como tratamiento antiedad. Cuesta 20 euros.

También tenemos la Compact Foundation SPF30 de Ainhoa, que filtra las radiaciones, unifica la piel y permite que las pieles sensible puedan (y podamos) maquillarnos. Tenemos tres tonos para elegir y cuesta 21,15 euros.

Así, la playa y la piscina se convierten en improvisados salones de belleza donde la naturalidad e ir guapa no están reñidos. No te olvides de comprobar qué tipo de cobertura ofrecen estos productos y, sobre todo, nunca olvides echarte bronceador.