Los 20 años de diferencia entre Aina Munar y Cati Pol no se notan cuando las dos han salido a la pista durante los torneos del Madison Beach Volley Tour 2019. La primera nació en octubre de 2001, la segunda en el mismo mes pero de 1981 y ambas son mallorquinas, con lo que tantas cosas en común también tenían que tener su repercusión en la pista.
No habían jugado previamente juntas, aunque hay que tener en cuenta que para la joven Aina era la segunda temporada que participaba en el circuito. No lo hizo nada mal en 2018, eso sí, al firmar dos quintos puestos en Tarragona y Melilla. En 2019 quería dar un salto de calidad y lo encontró con Cati Pol, aunque no disputó al temporada al completo con su compañera de Mallorca.
El inicio del año en la arena lo hizo en la Copa de Primavera de Madrid, donde terminó en quinta posición junto a Luana Araco. Esto suponía un buen arranque para un año donde la regularidad iba a ser el denominador común en todos sus torneos. En la Copa de la Reina de Maspalomas unió sus fuerzas junto a Sofía González, con quien cayó en cuartos de final ante Erika Kliokmanaite y Nuria Bouza después de haber perdido en primera ronda frente a la dupla Florián/Saucedo y vencido en la ronda de repesca a Biosca/Zunzunegui.
La primera prueba del circuito llegaba en Melilla y la ciudad autónoma se dio muy bien para la joven jugadora. De nuevo de la mano de Sofía González, finalizaron en tercera posición al caer en la última ronda de repesca frente a Soria/Carro por 2-0 (21-8, 21-18). Antes habían ganado sus dos primeros compromisos del cuadro principal, pero les condenó la derrota en cuartos de final ante Daniela Álvarez y Tania Moreno.
En el mismo mes, pero a finales del mismo, ambas jugadoras fueron a Tailandia a disputar el Campeonato del Mundo sub 21 en la ciudad de Udonthani donde cayeron en la primera ronda previa, pero les sirvió para vivir de primera mano su primer Mundial internacional y para coger experiencia de cara a futuros eventos similares que disputen en el futuro.
A la vuelta del país asiático, por fin llegó la unión con Cati Pol y con ello un par de resultados bastante positivos que seguro que guardarán para fijarse y seguir progresando en esta temporada 2020. Cati Pol también debutó en la Copa de la Reina de Maspalomas, pero lo hizo junto a Olga Matveeva. Ambas realizaron muy buen comienzo de torneo, venciendo por 2-0 a Biosca/Zunzunegui en la primera ronda y a Florián/Saucedo en cuartos de final. Cuando ya estaban en semifinales y tenían la final al alcance de la mano, se toparon con Erika Kliokmanaite y Nuria Bouza y cayeron 2-0. Esto les hizo ir al partido por el tercer puesto, donde volvieron a caer esta vez ante Florián/Saucedo, a quienes habían vencido previamente, y finalizaron cuartas en la prueba canaria que abría la temporada.
Cuando Aina y Cati unieron sus fuerzas en el circuito, sabían que el nivel iba a ser alto y que tenían que dar todo para destacar en uno de los cuadros femeninos con más nivel de los últimos años. En Ayamonte no les salieron las cosas como desearon, ya que pese a ganar a Hopf/Zunzunegui 2-0 en la primera ronda, cayeron ante Tania Moreno y Daniela Álvarez también por 2-0 en la segunda ronda y con idéntico resultado ante Palma/Santamaría en la primera ronda de repesca. Aún así era el primer torneo que jugaban juntas y tenían más oportunidades por delante para brillar.
Así lo hicieron justo una semana después en Laredo, donde lograron un meritorio 5º puesto. La primera ronda la solventaron tras luchar mucho frente a Biosca/Segarra en un partido que se resolvió en el tie break 1-2 (21-19, 19-21, 6-15. En la segunda ronda, eso sí, vieron cómo Paula Soria y Belén Carro las apeaban del cuadro de ganadores con un 2-0 (21-12, 23-21). Pese a caer al cuadro de repesca, no se vinieron abajo y siguieron dando el máximo. Dos victorias ante Maestri/Santisteban y las paraguayas Filippo/Erika les dejaban a las puertas de las semifinales. En la última ronda de la repesca tuvieron que medirse a Ester Ribera y Lia Merteki, pero la catalana y la griega estuvieron más acertadas en el último set y un apasionante 2-1 (21-16, 12-21, 17-15) en casi 1 hora de juego dejó a Cati Pol y Aina Munar con una gran quinta posición en la playa de La Salvé.
En el siguiente torneo dos semanas después en Tarragona querían seguir con la misma línea ascendente, pero de nuevo volvieron a caer antes de tiempo y pese a vencer en la primera ronda a la pareja Ruiz/Soto 2-0, en la segunda no pudieron con Daniela Álvarez y Sofía González y en la primera ronda de la repesca tampoco pudieron avanzar más frente a Vergara/Luana.
Aún así, les quedaba una bala en la recámara y esa la iban a usar en el Campeonato de España de Fuengirola. En esta ocasión tuvieron que partir desde la ronda previa, pero la ronda que tuvieron que jugar la superaron sin problemas ante Bonet/Pallarés al ganar por 2-0. En la primera ronda del cuadro principal volvieron a salir victoriosas como en las anteriores ocasiones, esta vez al superar a la dupla de ‘Claudias’ Santisteban/Maestri, pero volvieron a caer en la segunda ronda esta vez ante la pareja formada por Liliana Fernández y Elsa Baquerizo.
La ronda de repesca esta vez sí que les iba a sonreír, pues en el primero de los envites se enfrentaron a Vergara/Luana y avanzaron de ronda tras ganar en el tie break. En la siguiente tampoco iban a dar opciones a la dupla Matveeva/Moreno y volvieron a ganar en el tie break. Para redondear la jugada, su encuentro de la última ronda previa también se fue al tie break pero de nuevo el partido cayó de su lado, esta vez frente a Florian/Saucedo.
La oportunidad les había llegado y por fin estaban en semifinales, pero delante iban a tener a una gran pareja como es la compuesta por Ángela Lobato y Amaranta Fernández, quienes acabarían venciendo en Fuengirola y en consecuencia también a Cati Pol/Munar. Un disputado 2-0 (21-18, 21-16) les hacía pasar a disputarse la medalla de bronce ante Lili/Elsa de nuevo, quienes no dieron opciones y con un 0-2 (18-21, 20-22) finalmente hizo que Aina y Cati Pol finalizaran en una cuarta posición muy meritoria y satisfactoria.